16 septiembre 2017

El Régimen de 1978 censura la información sobre el 1-O

En la España del Régimen de 1978 que fluya la información sobre el Referéndum del 1-O en Catalunya se ha convertido en un auténtico derecho de la ciudadanía para conocer una realidad muy importante que defienden millones de personas. En los 40 años de la Constitución de 1978, un texto que acordó mantener el status quo del franquismo pasando página a la dura represión fascista y poniendo en el trono nuevamente a la familia de los Borbones, el reto soberanista catalán ha sido el único ataque que ha recibido este régimen corrupto que ha hecho del latrocinio y del desprecio a los ciudadanos su forma de ser. Que yo, particularmente, no sea nacionalista de ningún tipo no es óbice para que me parezca que la gente pueda pensar lo que le dé la gana y defender las ideas desde la no violencia y de una manera tranquila. Contra el pensamiento único que pretende los beneficiados por este régimen es necesario que se puedan defender y contemplar todos los puntos de vista de una manera serena.

La casta política representada por el PP, el PSOE y la franquicia ultraderechista de Ciudadanos ha puesto en marcha la maquinaria judicial que, en un grado muy alto, está bajo su control para evitar que, en 2017, fluya la información y vivamos una situación de censura que resulta ridícula. Está claro que el Régimen de 1978 está asustado y no van a escatimar en medios para que los ciudadanos vivamos de espaldas a esta realidad. Cada vez somo más los que pensamos que es de esperar que el reto soberanista catalán derribe este régimen para que los ciudadanos, de sus cenizas, podamos hacer una sociedad mejor y más justa.


Captura de la web oficial de referendum.cat censurada por jueces y partidos políticos del Régimen de 1978

La web oficial del referéndum ha sido cerrada y los do s mirrors que la Generalitat tenía fuera de España están bloqueados por las compañías de telefonía que, no olvidemos, algunas como Telefónica participan en el IBEX35 y son puertas giratorias para con trabajos bien remunerados para antiguos políticos del PP y PSOE o la familia real. Esto está ocurriendo en una España que se dice democrática y no en es Venezuela ogro creada por el PP, PSOE, Ciudadanos y el Grupo Prisa entre otros medios para atemorizar a la ciudadanía y hacer de cortina de humo de los problemas que nos interesan realmente.

Para acceder a la web del Referéndum Catalán se pueden realizar las siguientes acciones. Se puede usar el sistema Tor Proyect ejecutándolo de la manera más adecuada dependiendo de sin nuestro sistema operativo es Windows, Mac o Linux. En regímenes como los de Corea del Norte, Irán, la propia Venezuela o ahora España son un medio conocido hace tiempo para burlar en rastreo de las IP’s y sus bloqueos por partes de gobiernos totalitarios

También se puede usar un método más simple, funciona mejor desde tabletas y móviles, que es usando una serie de Proxys. La Generalitat ha difundido tres: hide.me/es/proxy, proxysiete.com y hidester.com/proxy. Una vez allí se debe de teclear uno de los mirrors creados por la Generalitat: ref1oct.eu.


Página oficial del Referéndum del 1-O alojada en un mirror y visualizada a través de Tor Proyect


Los hechos que estamos viviendo, de censura y represión político judicial, a una forma de pensar es uno de los hechos más graves que se pueden estar dando en las supuestas democracias occidentales en la actualidad y está sucediendo delante de nuestras narices. La opinión pública contra el referéndum es la opinión publicada de los beneficiarios del Régimen de 1978. Particularmente me gustaría que mi destino común en los años que me quedan de vida fuera cerca de los ciudadanos catalanes que es una cultura que admiro mucho desde hace tempo pero también entiendo que haya una parte importante de estos ciudadanos que no quieran saber nada del nacionalismo español que es el más rancio, grosero y sin perspectiva de futuro de toda la historia de los proceso nacionalistas comenzados en el siglo XVIII. La defensa de sus derechos a pensar distinto es la defensa de nuestra forma de pensar futura ante una casta que no dudará en saquear nuestros impuestos y someternos a una forma de vivir repugnante y decimonónica.