24 diciembre 2010

La farsa del PSOE


Es uno y único PSOE, que se encuentra tanto en Canarias como en Madrid, el que ha perdido por completo su identidad para gobernar y que es reo y cómplice de lo que llama los mercados y está dejando a la clase trabajadora sin derechos laborales y sociales, que es el partido que quiere que la gente se jubile a los 67 años, que emplea la contundencia del ejército y las medidas excepcionales de la Constitución para solucionar conflictos laborales o que negocia con las comunidades autónomas como Canarias, vendiendo su cuota de poder a partidos que viven de la corrupción como CC, prebendas que algún día se acabarán pagando muy caras, para mantener a un indeseable, inútil y cadáver político que ya apesta como Zapatero en la Moncloa dos años más. Que no traten de engañar y enredar más a la ciudadanía con el tema del catálogo de especies de Canarias diciendo que el PSOE en Madrid y el PSC en Canarias tienen distintas sensibilidades sobre el tema intentando dar un mínimo de coherencia a lo que es y que si el vicepresidente Cháves comente una ilegalidad manifiesta al no presentar un recurso de inconstitucionalidad a este texto en Canarias y siguen justificando su opinión, y tragando esta asonada autoritaria, diciendo que en Canarias van a seguir oponiéndose al catálogo y que cuando gobiernen, cosa que con el actual sistema electoral jamás va a suceder, reformarán la ley. Que se sepa, cuando los ciudadanos acuden a los colegios electorales sólo hay una papeleta que pone unas siglas inequívocas, independientemente para qué sean las elecciones, y que son las del PSOE.
La actitud de este partido que hemos visto estos días en torno a la ley del catálogo de especies de Canarias es algo que da bastante asco y que ha sellado al PSOE definitivamente como la tercera pata del trile que gobierna en Canarias, en la misma línea que CC y PP, en contra de los intereses de la ciudadanía y a favor de los empresarios promotores de disparates sociales y ambientales como el puerto de Granadilla para cuya construcción se hizo especialmente el catálogo y que tiene enfrentado a una buena parte de la ciudadanía y al gobierno de Canarias que es el mayor valedor de esta chapuza legal. Que el PSOE hable de las distintas sensibilidades que habitan en su partido o que un sin vergüenza como Hernández Spínola diga que el PSC no dice amén a todo lo que se manda desde  Madrid es no sólo enredar el asunto sino engañar de una manera vil y repugnante a la ciudadanía que dicen representar y de la que dependen porque muchos le votaron para que trabajaran para todos y no para unos cuantos o para mantener a un inútil como Zapatero en el gobierno de España. Lo que el partido en el que milita Hernández Spínola está cometiendo es una ilegalidad muy grande y manifiesta al saber que el catálogo de especies  es inconstitucional y, teniendo las herramientas que otorga el estado de derecho para corregir esto, no actúan en consecuencia para detener este despropósito como es su deber sino que pactan con este elemento para mantenerse en el poder un poco más. No sé si un juez podría ver claramente un delito en esta actitud, saber que una ley es inconstitucional y que no se hace nada contra ello a sabiendas, pero la causa moral en este despropósito la han perdido frente a la ciudadanía que estando cada vez más organizada se los va a acabar reclamando porque hace mucho tiempo que les pasó por la izquierda a toda la gente de este partido. Y esto lo hace un único, sólo y exclusivo partido que tiene más de 100 años, que ha renegado hace mucho de ser de izquierdas y que tiene como siglas PSOE.
Zapatero y los suyos se dirigen en los próximos meses a un batacazo electoral del que no hay parangón en España sino el de la UCD en 1982 y del que, aunque difícilmente podrá ser tan grave, perderán mucho poder y tardarán mucho tiempo en recuperarlo. Sin la retórica de que sea mejor el malo conocido que representa el PSOE frente a las fuerzas de la extrema derecha que representa el PP si es verdad que los que vamos a perder de una o de otra maneara son los ciudadanos a los que se nos exigen cada vez mayores esfuerzos fiscales, laborales y sociales para mantener a este sistema y cuyos beneficiarios son poderosas corporaciones bancarias a las que favorecen a toda costa este tipo de partidos. Esta crisis nos ha servido para saber que los gobiernos no hacen esta verdadera labor, que no gobiernan en realidad, y que en el caso de España el PSOE ha perdido todo tipo de autoridad financiera y que los que le queda es aplicar medidas económicas para que los millones de ciudadanos con sus pequeñas nóminas financien este absurdo montaje que llaman estado democrático y que no es más que una dictadura sibilina que opera en eso que se ha llamado los mercados. La visión de un Zapatero más que hundido tratando de que todos trabajemos hasta los 67 años para mantener este sistema, que cada día es más parecido al de la esclavitud, mientras sus ministros corren a salvarse a si mismos explotando al máximo el sistema de privilegios que hay montado para ellos como la ex ministra de la Vega, y del Vouge, que se va a una secretaría de estado, duplicando su sueldo y blindándose la jubilación.
Nosotros como ciudadanos mantenemos este sistema y hacemos que partidos en los que no se conoce la vergüenza como el PSOE se apoltronen delante de nuestras narices y nos mientan de manera reiterada una y otra vez. Lo que ha pasado en este partido es Canarias estos meses da un asco muy profundo. Un dinosaurio político que tenía que haberse retirado como Gerónimo Saavedra, a la sombra y manteniendo intrigas sucias, exilió de Canarias a un tipo como Juan Fernando López Aguilar y expulsó a un acomplejado como Santiago Pérez bajo una misma consigna: el PSOE nunca gobernará en solitario en Canarias y hay que acercarse en lo posible a CC que es el que tiene la llave eterna de gobierno en Canarias con el sistema electoral que se pacto mantener en Madrid en el próximo estatuto de autonomía. José Miguel Pérez y las gestoras que ha montado este partido en Tenerife dan fe de ello. Pocos socialistas con cargo se ha pasado a carro de la dignidad y prefieren estar callados en su partido para ver si algún día, en el reparto con CC, les toca algo o bien ya tienen su sistema de poder bien establecido. Ignacio Viciana ha dicho que tras el golpe de estado interno en el PSOE va a abandonar su partido no por dignidad sino para hacer otro partido pues, seguramente, un socialisto como este no puede hacer nada que no sea un chollo en lo público. Aún así, y sabiendo lo miserable de su pretensiones, su gesto lo pone bastante arriba en un partido cuyo consenso interno es callar y pactar para conseguir un puesto sin mucho qué hacer y bien pagado en lo público. Desde aquí animo a otros disidentes en este partido para que lo abandonen y que sean valientes por una vez en la vida que muchas veces se acaba valorando más la dignidad que criarse gordos y cebados por un poder que está completamente corrompido. No sé cómo estos supuestos socialistas pueden dormir por la noche si por el día han sido sucios, mezquinos y hacen política contra una masa de millones de ciudadanos que, esperemos, se lo acaben demandando a toda la miserable clase política.
Canarias 24 Horas, 20 de diciembre de 2010.