03 mayo 2010

Primero de Mayo

Trabajadores de Fundescan increpan a sindicalistos de UGT, organización culpable de que estos trabajadores lleven más de cuatro meses sin cobrar por quiebra de la fundación, el Primero de Mayo de 2010 en Santa Cruz de Tenerife. Foto de Arriba las que luchan Creative Commons Reconocimiento / No Comercial / Sin Obras Derivadas España 2.5


Con casi cinco millones de parados es todo un triunfo social y una muestra de que la gente es mucho más civilizada de lo que se cree para que no hayan estallado auténticas revueltas sociales. Atrás quedaron los primeros años del movimiento obrero en el que las chivatas de los empresarios acababan a cuchillo y aunque hoy en día tampoco hay que pedir eso sí que haría falta un poco más de conciencia obrera. Y es que parte de la mierda que vota al PP, como bien dice la canción de Guerrilla Urbana, pertenece a una buena parte de la clase trabajadora que está completamente desclasada y con la picha hecha un lío. En una situación que es un completo escándalo, y donde los gobiernos salen a sufragar con dinero público bancos, estados enteros, empresas automovilísticas y aerolíneas, los ciudadanos han acabado por ser carne de cañón y ser la parte peor parada de esta tragedia pues son miles y miles las familias en las que no entra ni un solo céntimo a fin de mes porque todos sus integrantes están en paro.

En España, por ejemplo, todos los gobiernos de esta presunta democracia han sabido por activa y por pasiva que el modelo productivo basado en el hormigón y la construcción estaba completamente agotado y que era pan para el momento y hambre para el futuro pero han seguido tirando de él porque interesaba a determinados sectores empresariales que se han hecho inmensamente ricos con este modelo devorador de territorio. Han creado con todo ello un nuevo parado de entre veinte y largo y treinta y pocos que abandonó pronto los estudios y que llegó a ganar mucho dinero con la construcción y ahora va a costar mucho trabajo formarlos porque, además, se resisten a ello. Socializando las pérdidas y privatizando por completo los beneficios ahora grandes corporaciones esconden las ganancias de años y la necesaria solidaridad para poner la máquina de nuevo a en marcha, para los que antes se forraban lo sigan haciendo en realidad, sale del ciudadano medio que es el que mantiene todo este tinglado. Para entender la poca gana que hay de cambiar de modelo productivo y de que toda la ley de economía sostenible de Zapatero no es más que un pufo, también con un importante chanchullo inconstitucional como el tema de las descargas, La Ministra Cristina Garmendia de Ciencia e Innovación, pero también el Gobierno de Canarias empezando por un populista Rivero, han dejado escapar un proyecto científico de muy gran envergadura como es el Telescopio Extremadamente Grande que se hubiera debido instalar en la isla de La Palma. Recordemos que en la actualidad el mayor proyecto de Ciencia, por tanto de I+D+I, ejecutado nunca en España en toda su historia es el Gran Telescopio de Canarias situado en esta misma isla pero que para cualquier potencia mediana del planeta esto es una instalación corriente. Es esta socialdemocracia volcada completamente a los intereses neoliberales, aunque disfrazada de progresismo, lo que nos ha llevado al fracaso pues si bien es fácil conocer al enemigo por sus formas este falso amigo al final es algo más perverso.

No conviene olvidar pasado este último Primero de Mayo las procesiones promovidas por esas nauseabundas organizaciones de fomentar la explotación laboral que se llaman Comisiones Obreras y UGT. Ver a los dos líderes de estas entidades pseudo obreras lamerse los genitales en un supuesto orgullo obrero produce, para decirlo con suavidad, todo el asco del mundo. Estos son los responsables que los trabajadores estemos cada día peor, acabarán pactando el despido libre camuflado de algo para seguir manteniendo sus estómagos agradecidos, pero luego se dan la fiesta en esta suerte de procesiones del uno de mayo, con todo el sentido más peyorativo que el acto de los católicos puede tener. En Canarias se da la absoluta paradoja que UGT salga estos días a celebrar el Día del Trabajo protestando contra la explotación cuando ellos mismos han sido explotadores en un caso tan triste como Fundescan. En una reciente y fallida concentración que hicieron estos sindicatos en Tenerife se dio la bufonada de que desde Comisiones se increpaba a miembros de UGT por este motivo como si este sindicato de intereses tuviera la suficiente dignidad para actuar así pues ellos tienen también sus tramas ocultas y sus gratitudes estomacales.

El chiste de todos los años también en Santa Cruz de Tenerife es que el Primero de Mayo no hay una sola marcha sino tres. Una la organizan CC OO y UGT por lo que suele ser rápida y temprana para que estos se vayan a la chuletada de rigor, otra por un grupo de sindicatos que podrían establecerse en cercanía a Intersindical Canaria y otra por la CNT y CGT. Lo normal en todo este panorama es que la gente se quede en las casas o como pasó este sábado que la gente se fue de tiendas organizando por el jaleo de Día de la Madre. Normal, madre no hay más que una y trabajo ahora poco y muy fragmentado a la hora de defender los derechos de los trabajadores.

Más que civilizada la sociedad, que no hace nada ante tanta infamia laboral y social que estamos sufriendo, está anulada y apagada. Se ha dicho ya una y mil veces que hay que superar el concepto tradicional de sindicatos y abogar por otro tipo de organizaciones que sean eficaces para abordar los nuevos problemas que han llegado tras la globalización capitalista pero, sobre todo, que sean independientes y que puedan superar el clientelismo a gobiernos y patronal de organizaciones ya descritas como CC OO y UGT. El cómo se habrá de hacer esto sin duda se debe debatir socialmente para que sean, de una vez por todas, los trabajadores los que decidan la manera en la que se han de organizar sin ningún tipo de paternalismos, ya sea del estado, de los empresarios o de falsas organizaciones sindicales. El problema es el mismo que el de todas las cosas y es que no sabemos si estamos preparados para dar el salto o preferimos la comodidad de vivir explotados pero que otros nos hagan el trabajo sucio.

Canarias 24 Horas, 3 de mayo de 2010.