06 julio 2012

Eurovegas, capitalismo de casino



Vivimos en un capitalismo de casino. No hay más que mirar estos últimos meses las bolsas y las primas de riesgo de países como España o Italia para ver cómo se especula alegremente, desde agencias opacas, con la deuda pública de estos dos países que cuentan con más de cien millones de habitantes para poner en riesgo la solvencia de éstos para que los que dirigen este tipo de operaciones salgan completamente forrados. Supuestamente esto es el libre mercado, jugar con la vida y el futuro de millones de personas obligando a la intervención de países enteros en prácticas idénticas a las que el Foro Monetario Internacional ha obligado a llevar a cabo durante más de medio siglo en América Latina por poner el caso. En este ambiente de ruleta rusa, donde cada uno de los ciudadanos corrientes tenemos una bala apuntando hacia nuestras cabezas que nos paraliza de miedo, no es de extrañar que los políticos marrulleros, chanchulleros, incompetentes, tahúres, populistas y especialistas en lanzar faroles como Esperanza Aguirre y Artur Mas se corran de gusto y se bajen literalmente los pantalones ante la llegada de los hombres de Sheldon Adelson, el oscuro magnate estadounidense de los casinos, el juego, la prostitución, el blanqueo de dinero y la estafa como ética de trabajo.
Antes de entrar de lleno con el espectáculo que han hecho estos dos personajes esta última semana con su particular competencia para que el futuro casino en Europa del mafioso Adelson esté en Madrid o Cataluña quiero referirme un momento a una previa que disputaron en Canarias los alcaldes, inútiles, de La Laguna o Santa Cruz del partido más mafioso que ha existido en Canarias sólo superado el último año por el PSOE: Coalición Canaria. Un partido que, por cierto, tiene condenado de manera firme al conseguidor del sur de Tenerife, Don José Alberto González Reverón, a cuatro años y medio de inhabilitación de cargo público al darse como hecho probado que enchufó a dos personas poniendo como garantía sus santos cojones y hasta el momento CC no ha hecho nada contra este corrupto y mentiroso según señala la sentencia en primera instancia. Sobre Eurovegas hemos oído que se prometía hasta 200 mil puestos de trabajo, ya será para muchísimo menos, y no sé si Clavijo y Bermudez tiene tantos amigos y familiares para enchufar pero esto les sonó a gloria e hicieron un amago para entrar en la puja, valga el símil de casino, de este Eurovegas y ambos ofrecieron terrenos en La Laguna y Santa Cruz más que nada, supongo, para salir gratis en la prensa y que se hablara de ellos un rato. Afortunadamente para nosotros la casa de putas que quiere montar Adelson en Europa no le cuadra en las Islas Canarias pero sus asesores se habrán quedado rascados porque esta tierra única de Canarias posee la materia prima esencial de la que se alimentan sus negocios: políticos corruptos y bananeros dispuestos a vender hasta su santa madre para que ellos y sus familiares no pasen penalidades en esta vida.
Será que estoy acostumbrado a tomarse un poco en serio lo de la soberanía, a pesar de estar en contra todo tipo de nacionalismo empezando por el sucio y ranció españolista, que miro como bastante desprecio las bases americanas en España donde la CIA torturaba a detenidos de Al Qaeda mientras el PSOE miraba para otra parte y todavía debo de ser uno de esos último bobos que están en contra de la OTAN pero he asistido con bastante repugnancia el espectáculo que desde Cataluña y Madrid se ha dado con esto de Eurovegas. ¿Pero quién coño es Sheldon Adelson para exigir que se tingan que cambiar una serie de leyes laborales y de la salud para que pueda montar sus puticlubs en España? A este tipo habría que mandarlo a la mierda directamente para que se lleve sus sucios negocios de prostitución, drogas y blanqueo de dinero a otra parte y que nos deje aquí con nuestra prima de riesgo por encima de 500. Pero qué coño se cree una señora como Esperanza Aguirre, representante de la nobleza española que nunca ha dado palo al agua, cuando dice que si hay que cambiar la ley antitabaco se cambia para que los casinos de este mafioso puedan funcionar en España para que la prostitución internacional, el narcotráfico y el blanqueo de capitales tenga un amparo legal en este país que cada vez deja más saca más cafradas a la luz de la chusma que nos ha gobernado. Preocupante es que hasta la ministra de sanidad, Ana Mato, no dé una respuesta tajante en contra de esta pretensión de no volver a permitir que la gente fume en espacios públicos compartidos cuando esto ha sido lo mejor que ha hecho el PSOE en casi ocho años de gobierno. A estos políticos populistas y oportunistas como Aguirre o Mas les importa un bledo la salud laboral y física de las personas con tal de asegurarse un espacio personal en el que ellos y los suyos puedan medrar. Digo aquí que muchas veces llamo inútiles a estos políticos, para mí el nombre de Paulino Rivero es sinónimo de esta palabra, pero no lo son realmente. En general, si estos políticos pusieran el énfasis que ponen en robar, engañar, aprovecharse de sus cargos, medrar y enriquecer a los suyos en hacer cosas por el bien común y lo público para que el interés general prime sobre todas las cosas viviríamos en el mejor de los mundos posibles y todos nuestros problemas serían, simplemente, cosa de otro mundo.
Sheldon Adelson es un mafioso y no lo digo yo sino el New York Times en un editorial que lo acusa de evadir impuestos y de pagar más de 60 millones de dólares para tumbar a Obama y seguir con estas prácticas sucias en todo el mundo. Tampoco soy yo el que dice que se vaya a casa sino que ya lo contó mejor que nadie Jordi Évole en un artículo previo a la visita de la delegación de Adelson a Barcelona en El Periódico. Lo que si espero es que este disparate legal, de prostitución, blanqueo de dinero y control mafioso que quiere montar Adelson no venga a parar a ninguna de las ciudades de España porque esto significaría hundir completamente nuestra economía que, que aparte de estar intervenida a partir de ahora, estará a merced del capricho de unos ladrones y sinvergüenzas profesionales que dejan a nivel de robo de escolares tramas mafiosas locales como el Caso Gürtel. En un país asolado por el desempleo los miles de trabajos que promete la gran casa de putas de Sheldon Adelson pueden sonar maravillosos pero hay que ser un poco más inteligente que una mentirosa patológica como Esperanza Aguirre y si todo es tan magnífico como promete que deje la Comunidad de Madrid y se ponga a trabajar como prostituta para Adelson. No lo hará nunca porque esta señora no sólo va de digna a pesar de rebosar chorizo sino porque, evidentemente, los empleos que promete este mafioso no tienen la calidad y cualificación que una sociedad abierta y digna se merecen.
Canarias 24 Horas, 2 de julio de 2012.